La Habanera, el Tango y la Milonga en la zarzuela
En otras ocasiones he comentado la aparición de la Habanera, la Barcarola y el Tango en la zarzuela, ahora quiero hablar del Tango-Milonga.
Y es que el Tango tiene un cierto protagonismo en la zarzuela, según nos cuentan los libros, la primera vez que aparece el nombre de “Tango” para nombrar al género musical, es en la zarzuela “Justicia Criolla” de Ezequiel Soria allá por 1897 en Buenos Aires.
Los cubanos consideraron el baile como un elemento social alrededor del cual se desarrolló un estilo musical, dando lugar a la contradanza que se transformó en danza y posteriormente en la Habanera, creando un patrón rítmico que a su vez dio origen a otros ritmos que conocemos hoy, siendo uno de ellos la Milonga que convivió con la Habanera, y que adoptó este patrón rítmico, el cual comparten desde entonces, y que dieron origen al Tango rioplatense, actuando la Milonga como elemento de transición entre la Habanera y el Tango.
Con esta introducción quiero hacer valer el papel de la Milonga en el repertorio zarzuelistico español, así tenemos el Tango-milonga “El dinero que atesoro” de la zarzuela "Los gavilanes", número musical que aparece poco antes que la “Marcha de la amistad” que todos conocemos; se muestra otro Tango-Milonga “Hay que ver” en la zarzuela de La Montería; el maestro Francisco Alonso por su parte, en una historieta cómica “El Chivo Loco” añade su granito de arena al mostrar un número con esta música, y este otro Tango-milonga de la zarzuela, “La estrella errante” con música de José Luis Lloret Peral, y letra de Armando Oliveros, que podemos escuchar en la Biblioteca Digital Hispánica.
Aunque aquí aparece como Tango-Milonga, la Milonga tiene un ritmo más vivo, más alegre que el Tango, sin embargo no se aprecia la diferencia.
En cualquier caso ninguno de ellos es bailable, al menos en el sentido en que nosotros bailamos la Milonga, ya que están basados en el diálogo con la música algo atropellada, pero en mi opinión, aunque no sean bailables hay que tenerlos en cuenta, quizás tengamos que hacer una representación de uno de estos números musicales en algún momento.
Podéis ver la relación que hay entre la Habanera y la Milonga en mis apuntes “Habanera el Baile”, casi al final.
https://segismundoencadenado.blogspot.com/p/habanera.html
Una duda razonable, ¿Es Tango o Habanera?
Al igual que existe confusión en los medios, entre la Habanera y la Barcarola, como expuse en su día, viene a ocurrir lo mismo entre la Habanera y el tango.
Solo que en este caso la duda es razonable, ya que ambos son primos hermanos. En la época dorada de las zarzuelas el Tango y la Habanera compartían música utilizando células rítmicas similares con ritmo binario en 2/4, siendo la Habanera el hermano mayor que junto con la Milonga llevarían de la mano a su hermano menor el Tango.
Debido a esta similitud rítmica que perduraría durante la época de la “guardia vieja del tango” los compositores de zarzuelas incluían números musicales donde el ritmo de Habanera era considerado ritmo de Tango, por lo que ambos eran sinónimos.
Así aparecen Habaneras con nombre de Tango en zarzuelas antiguas, como el “Tango de La Menegilda” y el “Tango de doña Virtudes” de La Gran Vía, o este otro “Dichoso Aquél que tiene” de la zarzuela Marina, y “Oiga usted Caballero” del Año Pasado por Agua; también, aunque no en la zarzuela tenemos, “tango María” de Francisco Tárrega, que es una Habanera con nombre de Tango, etc…
Sin embargo aunque la base rítmica sea similar el carácter es diferente, el Tango es un lamento, con música de amargue, “un pensamiento triste que se baila”, como diría Santos Discépolo; la Habanera son suspiros del corazón, nostalgia, añoranza, pero no lamento.
Desde que el Tango se hizo Tango pasando a ser 4/4, abandonando a la Habanera en 2/4, están claramente diferenciados, ahora no hay duda, la Habanera con carácter propio, con su balanceo característico es la Habanera y el Tango con sus cortes y quebradas es el Tango rioplatense que todos conocemos.
Habanera versus Barcarola
Entre las muchas Habaneras famosas que aparecen en el repertorio zarzuelistico español, hay una que por un error de pluma aparece con nombre de Barcarola, me refiero a la Habanera “Así escuchando de la mar” a bordo del buque Escocia, que se muestra en el quinto número musical de la zarzuela“ Los Sobrinos del Capitán Grant”, y aunque la misma partitura de esta zarzuela delata que es una Habanera en 4/4, aún así aparece cerca de la armadura con el nombre de Barcarola.
Este error de escritura sigue mostrándose hoy día en todos los medios de comunicación, incluso se muestran videos de esta zarzuela donde la Habanera se nombra como Barcarola, creando duda y confusión.
Es cierto que tanto la Habanera como la Barcarola son canciones del mar, de estilo sentimental y melodías sinuosas, ambas evocan lo marinero, incluso invitan al balanceo provocado por el ritmo de las olas. Quizás de ahí venga la confusión.
Sin embargo en lo musical son diferentes, la Barcarola es de carácter ternario escrita en 3/4 o en 6/8, la Habanera de carácter binario en 2/4 o en 4/4. Quizás no tenga mucha importancia si nos limitamos a escucharla sentados plácidamente en el sofá, pero para los que bailamos sí que es importante esta distinción, la Barcarola la bailaríamos a ritmo alegre de Vals, mientras que la Habanera la bailaríamos a ritmo lento de bolero o de tango.
La Barcarola también aparece en varias zarzuelas, por lo que en mi opinión, es importante tener en cuenta esta distinción, sobre todo si las agrupaciones castizas tienen que representar en algún momento este número musical en el escenario.
Para la mayoría de la gente esto no tiene importancia, pero los medios de comunicación deberían ser más rigurosos y nombrar las cosas por su nombre.
La Habanera es la Habanera y la Barcarola es la Barcarola.
¿¡Qué la Habanera se baila‽
Es celebre La Cantada d'havaneres de Calella de Palafrugell en la Costa Brava. Hace años pregunte en su sede, como bailan allí las Habaneras, me contestaron sorprendidos ¿¡Qué la Habanera se baila‽, no menos sorprendido quedé yo, ya que mi intención era recopilar información sobre el baile de la Habanera.
Los libros nos cuentan que la Habanera nace como género bailable, luego, por diversos procesos evolutivos, se desdobla en baile y canto, para más tarde adquirir la función lírica que es como se conoce hoy, formando parte del repertorio zarzuelístico español. La Habanera se ha diversificado tanto que tenemos Habaneras para todos los gustos, “Cantadas” (en Palafrugel), “Certámenes internacionales” (en Torrevieja), “Trovadas” (en Mayorga), y en muchos otros lugares de la costa, pero nunca dejó de ser bailable.
¿¡Qué la Habanera se baila‽, claro que se baila, de hecho cuando suena una Habanera en las salas, todos salimos a bailar, solo que no la identificamos como tal, así unos la bailan como bolero romántico, otros como tango, otros con pasos de valsecillo, como milonga, etc.. Y en mi opinión, todos bailarían bien la Habanera con añadir simplemente el balanceo que la caracteriza y la diferencia de otros bailes.
En el museo del Prado hay un cuadro titulado “Las Habaneras” pintado por Manuel Rodríguez de Guzmán en 1864 en Madrid. Se representa la forma de bailar de la época.
Se pueden ver mis apuntes sobre la Habanera en esta dirección:
https://segismundoencadenado.blogspot.com/p/habanera.html
Y unos videos que me grabaron mientras practicaba, en esta otra:
Habanera en clase: https://youtu.be/ed7n5uqXPls.
En nuestro mundillo castizo tenemos habaneras bailables, unas procedentes de zarzuelas, como “El Saboyano”, otras de cupletistas famosas como “Aquel Café”, de revistas como “La Violetera”, etc.. Además de las que aparecen en la discografía romántica popular; no en vano la Habanera es el “Amor en el Baile” según reza en la primera partitura encontrada (1842); vamos que no tenemos excusa, a bailar.
El balanceo de la Habanera
Pongámonos en situación: estoy viajando con mi pareja en un barco que partió desde Cuba con destino a España, la travesía es larga, de varios días, hay que pasar el tiempo lo mejor posible. Hace buen tiempo, en alta mar el pequeño oleaje hace que el barco se mueva levemente, de pronto en la cubierta suena una música rítmica y melodiosa, me animo e invito a mi pareja a bailar, la abrazo firmemente, no quiero que se vaya por la borda en uno de esos vaivenes, comenzamos a bailar, nos balanceamos, no se muy bien si el balanceo lo provoca la música sincopada, con su continuo ostinato, po-pom-pom pomm …. o el movimiento del barco, comenzamos a ejecutar las figuras de baile que nos enseñaron en la academia, figuras de Bossanova, Tango, Bolero, Valsecito, Milonga...el balanceo es casi continuo, al terminar la música se acerca el guitarrista y no dice: lo que habéis bailado es una Habanera.
Ahora pongamos que estoy con mi pareja tierra adentro, en un salón de baile de un pueblo de Valladolid, pongamos Mayorga, suena la música e invito a bailar a mi pareja, de pronto la pista parece que se mueve, abrazo a mi pareja, es un movimiento imaginario, aparente, provocado por las notas musicales que nos balancea, ejecutamos las figuras de baile que sabemos, el balanceo es casi continuo, me recuerda aquel viaje en barco, esos movimientos del baile son propiciados gracias a la composición musical que invita al balanceo y nos hace expresar a los de tierra adentro lo que sentían los marineros, comerciantes, músicos y poetas en sus largas travesías, manifestando sus alegrías y sus penas bailando y meciéndose con ese ritmo de compás cadencioso, de melodía plana, de movimiento ondulante y balanceo lánguido……. y es que estamos bailando la Habanera “La Paloma” de Iradier.
Lo que distingue a la Habanera de otros bailes es el Balanceo.
Habanera la gran olvidada.
El escritor Néstor Luján, en el prologo del Álbum de Habaneras de Xavier Montsalvatge comenta que “rara era la zarzuela española de fin de siglo XIX que no tuviera Habanera”.
Ciertamente son muchas las referencias que encontramos de la Habanera en el repertorio zarzuelístico y verbenero español, y aunque la mayoría no son bailables por presentarse como habaneras concertantes o cantables, si que existen algunas que se podrían bailar siguiendo los apuntes de la Habanera, imprimiendo los movimientos de balanceo que la caracteriza.
Que la Habanera además de ser un genero cantable es también un genero bailable lo encontramos en los versos del Chotis del Eliseo de La Gran Vía, donde dice: Se baila la Habanera, polka y vals, sin discrepar en tanto así el compás. En “Un Sarao Y Una Soirée”, bailan “La Dormilona”, muy lenta eso si. Y tantas otras como “El Saboyano” de Luisa Fernanda, “La Paloma” de Iradier, “Carmen” de Bizet, “La Bella Lola” (el himno del marinero), el “Tango de la Menegilda”, el “Tango de Doña Virtudes”, de La Gran Vía, que aunque aparecen con nombre de tango, son Habaneras, etc...
Algunos la bailan como tango o valsecito, otros como un bolero incorporando el balanceo, otros más nostálgicos, como contradanza de balanceo continuo.
Sin embargo a pesar de estar presente en muchas zarzuelas como he dicho, he visto poc@s chulap@s que incorporen este baile en sus representaciones, limitándose únicamente a gesticular en playback, considerándolo un genero únicamente cantable, pero sin bailar.
Si la Habanera se baila ¿porque l@s chulap@s no lo bailan?
(Técnica, Pasos, Figuras)
Existe una Habanera de Organillo de La Verbena De La Paloma, parte de ella basada en la Habanera concertante propiamente dicha entre El Julián y La Susana, otra parte basada en el preludio y otra parte en el dialogo del tabernero, ya casi al final de la obra.
Hay dos versiones, una de ellas muy rápida (el organillero estaba acelerado) que no es bailable como Habanera, otra ya más lenta que si se puede bailar como tal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario